Recuperación de La Cabra Blanca

En un rincón idílico de nuestra tierra, hemos revivido una joya perdida en el tiempo: la raza autóctona de cabra Blanca, desaparecida en los años 50, ha resurgido con un propósito más noble que nunca. Aquí, en los campos de Horta de San Joan, trabajamos en su cuidado y crianza, siguiendo un camino de respeto por la naturaleza y la tradición.

Nuestras cabras se alimentan de la generosa pastura semisalvaje que brinda nuestro entorno, proporcionándoles una dieta equilibrada y saludable, sin la necesidad de recurrir a prácticas intensivas. Esta alimentación natural se refleja en la calidad excepcional de su leche, que es el corazón de nuestro empeño: la elaboración de quesos y carnes de sabor auténtico y genuino.

Pero nuestro proyecto va más allá de la mesa y el paladar. Nuestras cabras desempeñan un papel fundamental en la conservación del entorno. Al devorar malezas y malas hierbas, cumplen una función crucial en el mantenimiento del monte, evitando que se convierta en un caldo de cultivo para incendios forestales. Así, contribuimos a la preservación de nuestro patrimonio natural y a la seguridad de nuestra comunidad.

En resumen, nuestro proyecto es un canto a la sostenibilidad y la regeneración. Con pasión y dedicación, hemos devuelto a la vida una raza casi extinta, protegemos nuestro entorno y ofrecemos productos que encarnan la autenticidad de nuestra tierra. Ven y únete a nosotros en esta aventura, donde la historia se mezcla con la naturaleza y el sabor se convierte en un acto de amor por nuestro planeta.