La contaminación del mar
Contaminación en el mar, un problema creciente
La contaminación del mar ha crecido de forma alarmante en las últimas décadas. Su origen proviene del vertido de diversos productos y sustancias generadas por los seres humanos y que acaban en los océanos de todo el planeta.
El 80% de la basura en el mar proviene de zonas terrestres, llegando al mar mediante el curso del agua en sus diferentes modalidades, según la fundación europea Surfrider, especializada en la lucha contra dicha contaminación. Otro 10% de la basura marina es abandonada en las orillas de ríos y costas, mientras que el 10% restante es tirada directamente al mar por el transporte marítimo y las actividades pesqueras y náuticas.
Contaminación de plásticos en el mar
Una de las contaminaciones en el mar que más preocupa es la causada por el vertido incontrolado de plásticos. El Foro Económico Mundial alerta de que la tercera parte de todo el plástico producido en el planeta termina principalmente en el entorno marino, el equivalente a 8 millones de toneladas anuales o el contenido de un camión de la basura lleno vertido cada minuto. Al ritmo actual, en 2050 habrá más plásticos que peces en los océanos, estima este organismo internacional.
El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) destaca el grave impacto en la fauna marina, que indirectamente acaba afectando al ser humano. Los expertos de dicha institución estiman que cada año más de un millón de aves marinas y más de 100.000 mamíferos marinos mueren a causa de los plásticos en los océanos.
Por si fuera poco, los plásticos se degradan y fragmentan con el tiempo hasta convertirse en pequeñas partículas, denominadas “microplásticos”. Incluso diversos productos llevan en su composición microplásticos: abrasivos industriales, cremas de todo tipo, pasta de dientes, champús, cosméticos, etcétera. Después de su uso, buena parte llegan a los océanos, provocando el aumento considerable de esta contaminación marina. Los microplásticos incluso pueden convertirse en elementos aún más pequeños, conocidos como nanoplásticos, que entran en la cadena alimentaria, ya que los peces los absorben, y llegan hasta nosotros.
Consecuencias de la contaminación del mar
La contaminación del mar por diversas fuentes se traduce en aguas más sucias y una pérdida de biodiversidad, es decir de la cantidad de especies que lo habitan. Las mareas negras de los grandes buques petroleros y sus consecuencias destructivas en mares y costas son una de las formas más conocidas y llamativas, pero en términos absolutos son responsables de una pequeña parte del petróleo que llega a las aguas. La gran mayoría proviene de pequeños y silenciosos vertidos de labores de limpieza o de la recarga de combustible en alta mar.
Metales pesados como el mercurio son ingeridos por las especies de la base de la cadena alimentaria, de manera que se acumulan, se “biomagnifican” en el resto de especies de la cadena al pasar a su organismo, pudiendo causar serios trastornos en el medio ambiente y nuestra salud. El abuso de fertilizantes por las explotaciones agrícolas también afecta a los océanos y altera su composición.
La excesiva emisión de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono (CO2), provoca el cambio climático y efectos negativos concretos en el mar, como la acidificación de las aguas. La destrucción de los corales o el aumento de zonas muertas en los océanos son algunas de sus consecuencias preocupantes.